lunes, 21 de junio de 2010
Pablo
Veo como armas tu maleta y la llenas de planes, metes las tortugas ninja que te apasionaron a los tres, el Mario Bro´s que te capturó antes que la lectura para regocijo de los diseñadores de videojuegos, doblas tus pasteles que celebramos hasta que te dió pena romper la piñata, tus regalos de Diciembre 25 junto con aquel calcetín lleno de dulces que encontraste aquella mañana en que te levantaste antes que nadie, en otro compartimiento pones tus días de misionero donde descubres una realidad ajena, atroz y de futuro incierto, despacio acomodas a tus amigos de toda la vida y aunque no sabes por que, tienes la certeza de que siempre estarán ahí, como hermanos; doblas tus sueños y esperanza, metes tus recuerdos, tus fiestas y en un rinconcito el primer beso que aquella flaca muchacha te regaló para tu sorpresa, guardas a todas aquellas mujeres que a tu temprana edad te han amado y que habrás de honrar, guardas también a aquellas a las que tu has amado y no saben que existes, en otro lugar pones a los libros no escritos y las historias no contadas, la llenas de tus planes, de un futuro deseado pleno de viajes y estudios.
Por fin terminas, corres el cierre con cuidado y decides partir, nuestras miradas se cruzan y se húmedecen, las palabras sobran y poco tienen que complementar al abrazo que nos damos.